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¡FELIZ DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER!


8 DE MARZO: 100 AÑOS DE LUCHA POR LA EMANCIPACIÓN DE LA MUJER Y EL PUEBLO


ALGO DE HISTORIA

La Internacional Socialista reunida en 1910 en la ciudad de Copenhague, Dinamarca, proclamó oficialmente la conmemoración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, gracias a la propuesta formulada por la socialista Clara Zetkin. El carácter de esta jornada debería permitir luchar por los derechos de la mujer y el acceso al voto.

Un año después, el Día Internacional de la Mujer fue conmemorado en Alemania, Dinamarca, Austria y Suiza el día 19 de marzo de 1911 con la participación de más de un millón de hombres y mujeres, quienes no solo luchaban por el sufragio universal, sino además por condiciones laborales dignas, derecho a ocupar cargos públicos, formación profesional y no discriminación laboral. Una semana después, el 25 de marzo, más de 140 trabajadoras murieron en un voraz incendio en la fábrica textil Triangle en la ciudad de Nueva York, lo cual tuvo repercusiones tanto en la legislación laboral estadounidense como en las futuras conmemoraciones del Día Internacional de la Mujer.

Posteriormente, en el año 1913, las mujeres rusas conmemoraron esta fecha el último domingo del mes de febrero, en las vísperas de la Primera Guerra Mundial, aglutinando sus fuerzas para luchar por la paz. Al año siguiente, las mujeres europeas celebraron el 8 de marzo para protestar contra esta guerra.

En el año 1917 las mujeres rusas escogieron el 23 de febrero, último domingo del mes para protestar por los dos millones de soldados rusos muertos en guerra; este hecho originó la renuncia del Zar; la revolución de febrero dio origen al triunfo de la Revolución Bolchevique en Rusia en el mes de octubre, lo cual significó el triunfo de la primera revolución comunista del mundo. Nótese que el 23 de febrero en el calendario juliano utilizado en Rusia en aquel entonces corresponde al 8 de marzo del calendario gregoriano utilizado en países como el nuestro. La revolución rusa favoreció la participación de las mujeres en la vida social, política y económica del país, el pago igual por trabajo igual, servicios médicos gratuitos antes y después del parto, ocho semanas de licencia de maternidad pagada, recesos en la lactancia, guarderías en las fábricas, licencia de dos días por la menstruación, matrimonio civil y divorcio, entre otros múltiples avances sociales.

En 1949 con el triunfo de la Revolución de Nueva Democracia en China se abolieron costumbres feudales como la venta de esposas, los feminicidios, la prostitución y las violaciones. Se permitió el derecho a elegir esposo, el divorcio, el estudio, la participación de la mujer en la política, el desarrollo de trabajos que antes solo eran permitidos a los hombres y la socialización del trabajo que la mujer hacía en el hogar, entre otros asuntos.

SALIR DE LOS CONFINES DEL HOGAR

Ha existido y existe el peso de la autoridad familiar sobre la mujer que se levanta sobre la ‘vida doméstica’, la cual representa su mundo, su deber: los hijos, la familia, la dependencia hacia el hombre. Se plantea que por su naturaleza las mujeres fueron destinadas para ser madres y que su más grande realización está allí, por ello su vida gira en torno al sostenimiento de la familia y la permanencia en el hogar.

Así, a la mujer de niña se le educa en la obediencia al padre, de esposa en obediencia al marido, de viuda o separada en obediencia a los hijos. Este trabajo no incluye nada que de algún modo pueda contribuir al desarrollo de la mujer, pues el trabajo doméstico, al alejarla de la política, estrecha sus horizontes, nubla su inteligencia, debilita el latir de su corazón y decae su voluntad. Así la familia es una fuente más de opresión para la mujer.”

Por lo tanto, hay que liberar el amor de la economía y a la mujer de la esclavitud doméstica. Para tal efecto, se necesita socializar el trabajo que la mujer hace en la casa; en un primer momento, debe existir la división del trabajo doméstico entre todos los integrantes de la familia, hasta que se construya una nueva sociedad en la cual todos trabajen de forma comunal, de forma tal que el Estado garantice la creación de guarderías, comedores comunitarios gratuitos, y formas de organización cooperativa que permitan que las familias dejen de ser la principal unidad económica responsable de las labores del hogar, para que estas no recaigan más sobre los hombros de la mujer.

DERECHOS SEXUALES Y REPRODUCTIVOS

Cambiar la estructura familiar, implica transformar las relaciones sociales entre hombres y mujeres e igualmente, las concepciones que se tienen frente a la sexualidad.

Desde temprana edad debe haber formación en sexualidad para que los niños y las niñas conozcan sus cuerpos, encuentren sus diferencias y aprendan a respetarse y cultivar su autoestima. La formación en los colegios y en las universidades también debe permitir reconocer cuáles son los derechos sexuales y reproductivos que tenemos para poder ejercerlos con libertad y responsabilidad. Bienestar Familiar reconoce la existencia de los siguientes derechos: Derecho a la vida, la libertad, la integridad personal, la seguridad, la intimidad y la confidencialidad, la igualdad, la salud sexual y reproductiva, la educación y la información y el derecho a la maternidad y paternidad responsables. Estos derechos deben mirarse no simplemente desde la óptica de la individualidad sino además, como derechos que el pueblo posee, que garanticen aspectos como la Planificación Familiar gratuita, la interrupción voluntaria del embarazo, la eliminación de la prostitución, la prevención y tratamiento gratuito de enfermedades de transmisión sexual, “descosificar” el cuerpo femenino, entre otros. ¿Cuántos embarazos no deseados dejarían de presentarse en adolescentes y mujeres adultas si la sexualidad fuera tratada sin tantos tabúes y hubiera una formación más clara frente a los derechos sexuales y reproductivos? ¡Necesitamos sacar los Rosarios de los ovarios de las mujeres y comenzar a tratar el tema sin tapujos!

Es necesario que hombres y mujeres nos organicemos; solamente la lucha organizada rendirá los frutos que el pueblo requiere para su liberación.

¡LA OPRESIÓN DE LA MUJER ESTÁ LIGADA A LA OPRESIÓN DE LA CLASE OBRERA Y SU LUCHA DEBE SER POR ERRADICARLA!

FUN Comisiones - MODEP

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